La lluvia llegó tarde este año, pero cuando llovió, llovió a cántaros. Por lo tanto, nuestros árboles jóvenes no solo se pudieron plantar en agosto según lo planeado, ¡la tasa de supervivencia de las plántulas plantadas también es particularmente alta este año!
Ahora los bosques jóvenes tienen que estar bien vigilados para protegerlos de la intrusión de animales de granja con apetito por árboles jóvenes. Además, las plántulas deben cuidarse y su hábitat debe mantenerse ordenado; en particular, se debe cortar la hierba que los rodea, que luego se puede usar como forraje o para construir techos.
Por el momento sólo quedan los plantones de árboles frutales en el vivero, donde están siendo cuidados. Mientras tanto, se están preparando nuevas semillas para el 2022, porque dependiendo de la especie de árbol, se deben lavar o hinchar. Para que la nueva generación de árboles pueda crecer a partir de este mes, pronto comenzarán otros trabajos preparatorios como crear camas, mezclar humus o llenar macetas.
Además de las actividades en el vivero de árboles, habrá un enfoque especial en la plantación de árboles en los huertos familiares en los próximos meses: el objetivo es que esos huertos produzcan suficiente biomasa y así puedan mantener a las familias residentes (además de frutas y similares, esto también incluye forraje, leña y madera).
Nuestro proyecto Shebedino se lanzó en 2018 con la ayuda de un grupo local de mujeres, bajo el liderazgo de la Organización Integrada de Desarrollo de la Mujer, con la que nuestra ONG socia Etiopía verde ya ha implementado muchos proyectos de reforestación desde 2009.
