Huellas de una biografía.

Su vientre muestra una gran cicatriz que le recuerda un episodio pasado en la unidad de cuidados intensivos de un hospital en Río. Él es el fotógrafo de esta foto – andreas weiser. Fue un momento difícil pero importante para él, dice. Diez años después, en un pequeño pueblo de la isla brasileña de Boipeba, se encuentra con un pescador con una cicatriz similar. No puede evitar preguntarse cuál es su historia y se conmueve por la sinceridad del hombre.

Andreas Weiser - El curso del mundo...

El hombre desaparece en su pequeña choza por un momento. Cuando regresa, lleva un puñado de piedras pequeñas. Son cálculos renales, responsables de la cicatriz en su vientre y ahora una ocasión para hablar de su propia biografía pero también de la historia de su pueblo. Hace 20 años, Boipeba solía ser un pueblo de pescadores en un sueño lejano al mundo moderno. Aquellos días terminaron con el acelerado desarrollo de Boipeba como destino de vacaciones.

Sin embargo, algunos de los hoteleros europeos y brasileños han hecho un esfuerzo para dar forma a un turismo más sostenible en Boipeba. Como organización comunal buscan mantener los efectos sociales y ecológicos en un nivel tolerable.

Sin embargo, para el pescador, la velocidad con la que ha cambiado su aldea sigue siendo difícil de comprender. A él todavía le parece un milagro hablar por teléfono con alguien que vive al otro lado de la isla. Y parece absurdo imaginar a la gente viajando en estos enormes objetos de acero que muy por encima de él dibujan estelas de vapor en el cielo azul profundo.

Mientras hablan, Andreas Weiser toma estas fotografías de la cicatriz que comparten, incluso de los cálculos renales.

Andreas Weiser - El curso del mundo...

Cuando regresa a Boipeba cuatro años después, en abril de 2012, para tomar más fotos, se da cuenta de que el hombre ha envejecido mucho desde su último encuentro. En los surcos del hombre el fotógrafo detecta síntomas de una vida dura en la pobreza.

El cambio ha dejado sus huellas en la vida del ex pescador. En lugar de lanzar sus redes, hoy en día trata de ganarse la vida vendiendo cestas tejidas a los turistas. Desde que se están explotando los yacimientos de gas en alta mar, el negocio de la pesca ha disminuido porque ya no vale la pena: no hay pescado. En cambio, ahora hay turistas. El fotógrafo suspira: “El curso del mundo”. Pero este curso no es inevitable y con Andreas Weiser esperamos moldearlo hacia un objetivo de justicia e igualdad social.

Andreas Weiser - El curso del mundo...

Fotokunst von Andreas Weiser - Der Lauf der Zeit...
Cantidad del árbol
346.136
Desde 2021 ya hemos podido plantar 346.136 árboles gracias a las fotografías vendidas en Photocircle. Absorberán aproximadamente 27.690.880 kg de CO₂ en los próximos cinco años y mejorarán las condiciones de vida de la población local.