Finalmente, el verano está aquí y los tan esperados rayos de sol hacen brillar el verde de las plantas y los árboles frente a nuestras ventanas. ¡La oportunidad perfecta para integrar un poco más de verde en nuestra vida cotidiana también!
¿Por qué? Porque el verde es un color muy especial: significa vida, frescura y fertilidad, relajación, confianza y nuevos comienzos, y muchos de nosotros sin duda lo asociamos con pausas en el ritmo acelerado de nuestras vidas. Un domingo de paseo por el bosque, un fin de semana de acampada en el lago, una semana sin teléfono ni internet en un remoto refugio de montaña: la naturaleza es buena para nuestra salud mental. Verde significa desaceleración, desintoxicación digital y respiración. Así que el veredicto es obvio: necesitamos más verde en nuestras vidas.
Además de la solución más obvia (una mini-jungla para el alféizar de la ventana, el balcón o la sala de estar), el color verde también se ve fabuloso en las paredes. Te mostraremos cómo se hace.